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Saludos, apreciadas damas de la colmena, con la edición que nos traen cada semana, donde nos invitan a reflexionar con los importantes temas, como el de la estimada @kerrislravenhill, me permito participar:

Cada año de enero trabajo en el presupuesto de mi hogar y mi reciente paseo por un importante centro comercial me recuerda cómo nuestras metas financieras pueden verse socavadas por la tentación de gastar. ¡Cuáles son sus estrategias y tácticas para mantener el rumbo?

En mi país el costo de la vida es muy alto, lo cual nos dificulta a muchos mantener un buen nivel de vida.
Existe una gran parte de la población como los que se han ido y los que continúan tomando la decisión de irse a vivir a otros países, con todo el enorme desafío de trabajar para cumplir metas y sueños y adaptarse a otras culturas.

Particularmente creo que lo principal es ubicarnos en nuestra situación económica real, anteriormente no tenía un plan para ello, pero con el cambio drástico debido a la crisis económica y que me llevó a usar en ese tiempo las tarjetas de crédito, llegué a tener una deuda casi imposible de pagar. Luego hicieron la reconversión monetaria en el país y esa deuda quedó prácticamente saldada.

Sin embrago, toda ésta situación me llevó a pensar siempre en hacer un presupuesto de ingresos y gastos, de tal forma que nuestros gastos nunca sean mayores a nuestros ingresos.
Entre las cosas que he estado haciendo junto con mi hija es evitar comer fuera, he estado cocinando más, me gusta la cocina y algunas de mis recetas las he publicado en Hive.

También hemos controlado el gasto diario en chucherías, a mi hija y a mí nos encantan, pero también nos hemos ahorrado gran parte de nuestro dinero en el mes en éstos aperitivos que además nos engorda.

Compramos ropa y prendas que podemos usar en diferentes ocasiones y combinarlas de diferentes formas. Evito usar las tarjetas de crédito en lo posible, la idea es no incrementar los gastos.

Con el incremento de los gastos en los servicios de condominio, internet, telefonía celular y fija, televisión por cable, sólo nos permitió el pasado año ahorrar algo de dinero, lo bueno fue que cuando se me dañó la PC y después el celular, pude tomar de allí para solventar esos gastos de reparación.

Espero este año con lo que podamos ahorrar, hacer unos arreglos a mi casa.
Nos hemos llenado de paciencia y de fuerza de voluntad para evitar desmotivarnos, el no llenarnos de preocupación va de la mano con nuestra salud.

Las donaciones caritativas son una parte normal de mi presupuesto. No siempre se trata de donaciones en efectivo, pero también pueden ser otros recursos como su tiempo y talento. Nombra tu organización benéfica favorita ¡ y qué la hace especial para ti?

El hacer donaciones habla mucho de la calidad humana de las personas, aunque no siempre se trata de dinero, pero en realidad lo que he podido ayudar es enviando rubros de alimentos cada mes al personal que presta el servicio de aseo urbano en la residencia donde vivo, su trabajo se limita a recoger la basura frente a la urbanización, sin embargo hacen la excepción de entrar a las áreas de caminaría para hacerles mantenimiento.

Ellos piden esa colaboración para prestar el servicio de poda y limpieza del jardín cada tres meses, la mayoría de esas personas son madres y padres de familia numerosas y pienso que si para mi hogar conformado por mi hija y mi persona, se nos hace difícil la situación, me imagino para ellos, para los que tienen niños pequeños, también les damos ropa en buen estado que ya no usamos, al final de cada año.
Pido a Dios que en estos tiempos difíciles nos ayude a sanar nuestra economía, el bienestar de tener una economía sana se va a reflejar en una mejor calidad de vida tanto para cada uno de nosotros como para cada familia.