In English

Greetings dear Ladies, with the topics you bring us each week to help us reflect, with the questions this time from our dear @marivic10, here is my participation:

During the time I was working as Coordinator of the Finance Department in a University, I became exhausted from dealing with the rush, the demands of the boss and so much work for so few people, I had moments of tiredness, stress, desperation for so much work and I have always thought that it is normal.

I remember some time ago a colleague from another Department, she was promoted to Deputy Director, she was also preparing to get married, one day another colleague told me that she sent for me in her office, I was surprised when I went in to see that she could not get up from her chair.

Her stress was such that her body was not responding, she was shaking, we gave her some tea, we talked to her, she asked me not to leave her alone and to calm her down I offered to take hers home in my car, all this was in her mind because of the stress that was overwhelming her.

Seeing that situation with my friend made me think that all extremes are bad, it is true that you should work to live, not live to work, which is what she was doing at the time. After that situation, she resigned from her position, postponed her wedding for a few days while she recovered and finally travelled to Europe on her honeymoon.

It is always a good idea not to overwhelm ourselves with work, not to try to do it beyond our capacity, to keep doing it with the same enthusiasm. In particular, I love my profession, I have always loved my work, because it is related to my career.

I have never liked to take my work from the office to the home, I think it is necessary to take time for ourselves, and what better time to do it than in the comfort of our own home.

I believe that everything in this life is connected, if we are not happy at work, we will be a little less happy in other areas, because, inevitably, discouragement and stress will spread to all areas of our life and I firmly believe that it is worth fighting for what we want.

The idea that women could be professionals and work outside the home began only recently in modern families, yet women always carry the lion's share of the duties.

It is true that because of our profession we spend most of our time outside the home, and although it is not my case, I know of some women who prefer to come home later, who have a partner and children but when they live with their parents or in-laws, perhaps that makes it difficult for them to be in those conditions, so that they do not have to face all that is involved in running a clean house and well cared for children.

We all feel tired and it is normal, but it is something we must accept after a day's work, it is part of fulfilling our obligations when our children are young. Fortunately children grow up and we can give them certain activities, and it is our time to talk about rules, obligations and rights with our family members.

It is necessary to be aware, most women know that family awareness is low and less rewarded, because everyone takes it for granted that we always take care of the details for a happy family. For all or most women the smooth running of their home is paramount, the care of their children and their husband.

What is important is to seek balance for and with ourselves, we must always remember that what we need, what we want and what we deserve, no one will do it for us, every day I have the opportunity and I thank God, to give my life new reasons to be happy, we must value and feel satisfied with what we do.

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The pictures in my gallery taken from my Redmi 9 phone and edited in canva
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En Español

Saludos estimadas Damas, con los temas que nos traen cada semana para ayudarnos a reflexionar, con las preguntas en esta oportunidad de nuestra estimada @marivic10, a continuación mi participación:

Durante el tiempo que estuve laborando como Coordinadora del Departamento de Finanzas en una Universidad, llegué a sentirme agotada de lidiar con las prisas, de las exigencias del jefe y de tanto trabajo para tan poca gente, tenía momentos de cansancio, de estrés, de desesperación por tanto trabajo y pues siempre he pensado que es normal.

Recuerdo hace algún tiempo a una compañera de otro Departamento, le dieron un ascenso como Subdirectora, ella estaba además con los preparativos para casarse, un día otra compañera me dice que ella me mandó a llamar a su oficina, me sorprendió cuando entré al verla que no podía levantarse de la silla.

Su estrés estalló de tal manera que su cuerpo no respondía, ella estaba temblando, le dimos un té, conversamos con ella, me pidió que no la dejara sola y para tranquilizarla me ofrecí llevarla en mi auto hasta su casa, todo eso estaba en su mente por el estrés que la estaba agobiando.

Ver esa situación con mi compañera, me hizo pensar que todos los extremos son malos, es cierto que se debe trabajar para vivir, no vivir para trabajar, que era lo que ella estaba haciendo en ese momento. Después de esa situación, ella renunció al cargo, pospuso unos días su boda mientras se recuperaba y finalmente viajó a Europa en su luna de miel.

Es siempre buena idea no abrumarnos con el trabajo, no tratar de hacer más allá de nuestra capacidad, para seguir haciéndolo siempre con el mismo entusiasmo. En particular, a mí me encanta mi profesión, siempre me ha gustado mi trabajo, pues es referente a mi carrera.

Nunca me ha gustado llevar el trabajo de la oficina a la casa, pienso que es necesario tomarnos un tiempo para nosotros, que mejor momento de hacerlo que en la comodidad de nuestra casa.

Creo que todo en esta vida está conectado, si no somos felices en el trabajo, seremos un poco menos felices en otros ámbitos, porque, inevitablemente, el desánimo, el estrés se va contagiando a todas las áreas de nuestra vida y creo firmemente que vale la pena luchar por lo que queremos.

La idea que la mujer pudiera ser profesional y trabajar fuera de casa comenzó hasta tiempos recientes en las familias modernas, aun así, la mujer siempre lleva la mayor parte de obligaciones.

Es cierto que por nuestra profesión la mayor parte del tiempo lo pasamos fuera del hogar, y aunque no es mi caso, sé de algunas mujeres, que prefieren llegar más tarde a sus casas, que tienen pareja e hijos pero cuando viven con los padres o suegros, quizás eso se les dificulta estar en esas condiciones, para no enfrentar todo lo que conlleva el buen funcionamiento de una casa limpia e hijos bien cuidados.

Todas la personas sentimos cansancio y es normal, pero sí algo que debemos aceptar después de un día de trabajo, es parte de cumplir con nuestras obligaciones cuando nuestros hijos están pequeños. Afortunadamente los hijos crecen y podemos ir dándoles ciertas actividades, y es nuestro momento de hablar de reglas, obligaciones y derechos con los miembros de nuestra familia.

Es necesario tomar consciencia, las mujeres en su mayoría saben que la concienciación familiar es poca y menos gratificada, porque todos dan por sentado que siempre cuidamos de los detalles para una familia feliz. Para todas las mujeres o para la mayoría el buen funcionamiento de su hogar es primordial, el cuidado de sus hijos y de su esposo.

Lo que sí es importante, es buscar el equilibrio por y para nosotras mismas, debemos siempre recordar que lo que necesitamos, lo que queremos y lo que merecemos, ninguno lo hará por nosotras, todos los días tengo la oportunidad y doy gracias a Dios, de darle a mi vida nuevos motivos para ser feliz debemos valorar y sentirnos satisfechas con lo que hacemos.

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Las fotografías en mi galería tomadas de mi teléfono Redmi 9 y editadas en canva
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