💐 {12/10/24} ✦ 🌸 LOH #206 🌸 Childhood memories, tears for unsweetened coffee and “I don't want to be Joan of Arc anymore” ✦ 🇪🇸 │ 🇺🇸

Oh, la austeridad forzada. La crisis económica. La escases de alimentos. Mi familia esta llena de personas trabajadoras así que aunque no tenemos grandes riquezas materiales, digamos que la estabilidad en muchos aspectos de la vida estaba asegurada.

Pero hay cosas que no puedes controlar, como la falta de abastecimiento de productos en el mercado. Hace unos años no se conseguía azucar en mi ciudad, y mucho menos azucar morena o azucar especial para personas que sufren de diabetes.

En la vida me imaginé yo que llegaría el día donde faltara un poquito de azúcar para el café o que el arroz multiplicara varias veces su precio en pocos meses (un año especialmente malo donde pasó de costar 0.13 $ a 1.10 $ el más barato).

Ese mismo año tambien ocurrió una gran escases de agua, y las recargas para los tanques de agua subterráneos tenían un costo de 30$ aproximadamente, y sin garantía que el agua fuera potable. Mucha gente se enfermó por eso.

Una vez en ese año simplemente no había ni agua para tomar, y los vecinos que tenían no la compartían (creo que quede tan traumada de que una vecina nos negara un vaso de agua que siempre lo tendre grabado en la memoria).

Creo que estoy omitiendo muchas cosas mucho mas tristes pero de todo, aquí encontré una valiosa lección de vida que de otra manera no hubiera podido aprender:

A valorar más las bendiciones que tenemos, que nada es pequeño, una cucharada de azúcar puede iluminar el día de una familia, y un balde de agua puede ser un milagro para una mamá que no ha podido lavarle las manos a sus hijos en días.

Crees que esas cosas pasan solamente en paises remotos y subdesarrollados, muy lejos de ti, en paises pobres, pero no, aun viviendo en un pais "rico", estas cosas pueden suceder.

Es algo que simplemente no vas a entender si te lo explican. Lo tienes que vivir tu misma.

Aprendí a valorar más todo, a no desperdiciar nada. Ahora el agua la reciclo todo lo que puedo y el arroz... bueno, digamos que nunca he vuelto a verlo de la misma manera. Simplemente ahora me parece demasiado valioso y no permito que nada se desperdicie en casa "aunque me sobre y tenga 5 kilos mas en la alacena".

Oh, forced austerity. The economic crisis. The food shortage. My family is full of hardworking people so even though we don't have great material wealth, let's say stability in many aspects of life was assured.

But there are things you can't control, like the lack of supply of products in the market. A few years ago there was no sugar in my city, much less brown sugar or special sugar for people suffering from diabetes.

I never imagined that the day would come when there would be a shortage of sugar for coffee or that rice would multiply several times its price in a few months (a particularly bad year when it went from costing 0.13 $ to 1.10 $ the cheapest).

That same year there was also a huge water shortage, and refills for the subway water tanks cost about $30, with no guarantee that the water was safe to drink.

Once that year there was simply no water to drink, and the neighbors who had water would not share it (I think I was so traumatized by a neighbor denying us a glass of water that I will always remember it).

I think I'm leaving out a lot of much sadder things but all in all, I found a valuable life lesson here that I would not have been able to learn otherwise:

To value more the blessings we have, for nothing is small, a spoonful of sugar can brighten a family's day, and a bucket of water can be a miracle for a mother who hasn't been able to wash her children's hands in days.

You think that these things happen only in remote and underdeveloped countries, far away from you, in poor countries, but no, even living in a “rich” country, these things can happen.

It's something you simply won't understand if it's explained to you. You have to live it yourself.

I learned to value everything more, not to waste anything. Now I recycle water as much as I can and rice... well, let's just say I've never looked at it the same way again. It simply seems too valuable to me now and I don't allow anything to go to waste at home “even if I have 5 kg more in the cupboard”.